viernes, 15 de enero de 2010

Cambiamos de año y nada ha cambiado















Enero 2010, cambiamos de año, cambiamos de década, pero poco ha cambiado para los galgos y podencos que viven en España.
Hace unos días que no escribo porque buscaba las palabras que pudieran transmitir la tristeza que nos embarga a todos los que formamos el equipo de Galgos112 cuando recibimos casos como el de Blanco, en Sevilla, que con su cadera luxada, su tobillo roto y su delgadez, ha tenido suerte en su desgracia de encontrarse con una persona con sentido común y ganas de mojarse.
Como el de Zeus, que fue rescatado por la asociación Uprodea en unas condiciones tremendas, con una pata rota y una enorme herida en el costado.
Como el de Vida, recogida por la asociación Ddevida con un ojo putrefacto colgando de su cara y dos tremendas heridas en su delgadísimo cuerpo, dando tumbos por el centro de la ciudad.
A este pequeño le dieron un palazo en el lomo y a este otro le pisó un caballo.
Trufa, Onice y Juncal, las tres atropelladas hace poco más de un mes, por coches, con diferentes niveles de gravedad...
Podemos hacer una lista, muy larga para tan poco tiempo de año transcurrido, de horrores protagonizados por galgos y podencos sin que la mayoría de las personas que se cruzaron con ellos hayan querido hacer algo al respecto.
Como personas estamos consternados, como asociación estamos furiosos porque nuestro trabajo parece no tener fin, ¿cuántos perros creéis que es posible rescatar de la muerte agónica?, ¿qué le pasa a nuestra sociedad que no toma conciencia de que el sufrimiento animal es tan sufrimiento como el humano?
¿Hasta cuándo se podrá torturar, tirar o matar a un perro sin que el responsable tenga ningún castigo?
¿De qué sirve que haya un registro de animales si nadie lo controla, si nadie se fija en él, si da igual que un perro tenga chip y sea abandonado, torturado o matado? Aquí no pasa nada.
Los malos están campando a sus anchas, y lo vemos todos, las perreras están llenas, las calles, los refugios, todos sabemos cuándo empieza la temporada de caza y cuándo acaba por la cantidad de perros abandonados, destrozados, muertos, con lo que nos cruzamos. Se ha normalizado la brutalidad.
No quiero que vuelvan a decirme cosas como ‘me acordé de ti ayer porque vi pasar un galgo en los huesos con una pata rota corriendo por la carretera’….
Me gustaría que un día me dijeran que se han acordado de mí porque han querido adoptar un perro abandonado y se han encontrado con que no había ninguno.

5 comentarios:

Amanda B. dijo...

No hay derecho a que hoy por hoy sigan apareciendo animales en estas condiciones.... es subrealista... no tengo palabras..

koletta-1 dijo...

Lo que ocurre con los animales dice mucho de este país, nada bueno. Menos mal que cada vez hay más gente con sensibilidad. De todas formas, es desesperante y entra tristeza, rabia, impotencia...

Esther dijo...

Como siempre te has expresado muy bien Marité, y si podría decir una palabra más fuerte que furiosa, como se puede ver pasar por delante de tus ojos estos animales tan heridos y no hacer nada??????, como se puede ser tan desgraciado?? tan inhumano?? hay tantas palabras para definir a esa mierda de gente, porqué si son unos mierdas!!!!!!!
Solo ver las fotos hace que te duela el alma y a todos los que ven un animal herido y no hacen nada les deseo que les duelan otras cosas!!!...............

Cristina Bahamonde dijo...

A mi, la histora del galgo con el ojo colgando y podrido, deambulando por Utrera durante días, me ha afectado especialmente.
Como bien deciais, es que ya no es ni como Trufa, que fue encontrada en el campo moribunda, ESTA VAGABA POR EL MEDIO DE UTRERA durante días. Lo cual me parece ya tan increible que no salgo de mi asombro, ira, y rabia. No digo ya más palabrotas porque me quedaría bien a gusto. El trabajo es de cambiar leyes, pero, cómo se cambia la mentalidad de la gente??? Qué harán los hijos de estas personas??? Lo que ven!! Cómo se lucha contra la ignorancia y la insensibilidad???

adavel dijo...

Nunca he escrito en este blog aunque os leo diariamente, pero ver que en lo poco que llevamos de año, ya habeis visto todo esto...y lo que desgreciadamente no habeis visto me ha animado a escribir y deciros que comparto vuestro sufrimiento ,mala leche y algo más.

Yo tengo una galga adoptada en "Galgos sin fronteras" en el verano del 2008 y desde entonces lo que les pasa a los galgos y a los casi olvidados podencoa me afecta mucho.

Animo a la protectora a seguir con su labor tan necesaria.