domingo, 27 de septiembre de 2009

Quien tiene un amigo, tiene un tesoro.



Si echamos un vistazo a nuestro garage, o al del vecino, recordaremos como tenemos las herramientas cuando no las usamos, en general, amontonadas, polvorientas...olvidadas.
Así que no será dificil imaginar, como malvive, un animal que ha sido tratado desde que nace, como una de ellas.
Detrás de cada adopción, hay una historia de vidas cruzadas, la del galgo, la de su verdugo, la de su rescatador, la de su cuidador...y por último la de su adoptante.
Porque detrás de cada adopción, hay muchos pasos que dar, por muchas personas solidarias que dejan todo por hacer posible el milagro de salvar una vida.
Una cadena de personas , que movidas por el único, pero ambicioso objetivo de salvar a cuantos galgos puedan, se pone en marcha a cada rescate, dejando muchas veces aparcadas a sus familias, o una estupenda barbacoa con amigos, para acudir al rescate del galgo en apuros.
El rescate, a veces resulta una labor de trapecistas, en una cuerda llena de tramos deshilachados, que en cualquier momento se puede romper, y si se logra , el verdadero trabajo estará por llegar. Curar sus heridas, las que están por fuera y las que están por dentro, estas últimas a menudo mas difíciles de cerrar, a enseñarle que no todos los humanos son malos, a perder el miedo cuando este existe, a vivir en paz y, sobre todo, a dejar todos sus malos momentos atrás, muy atrás...
Para las personas que formamos la asociación, cuando entregamos un galgo en adopción, lo depositamos en tus manos, y es como una pequeña pero valiosa joya la que te confiamos, pensando que lo hacemos bien, que es una buena familia para el, y que después de nosotros seguirá a salvo.
Con el corazón encogido a cada adopción, damos las pautas necesarias para facilitar el cambio de manos y adaptación del galgo en su nuevo hogar, y cruzamos los dedos, para que los adoptantes se impliquen lo necesario como para cumplirlas, que tengan en cuenta la importancia de seguir nuestros consejos para que todo vaya bien, que tengan en cuenta que en la labor que desarrollamos , ellos toman el relevo y que son el último eslabón de la cadena solidaria de Galgos 112.
Antes pues, de adoptar a un galgo, se debe reflexionar y aceptar el compromiso que se adquiere, como ya hemos dicho en alguna ocasión, no solo con la asociación, si no con el galgo.
Cuando los consejos o pautas, no se tienen para nada en cuenta, pueden surgir los problemas, derivados, a veces, del propio miedo del galgo, a perder a quién mas quiere.
Y a veces, al mínimo problema, algunas familias optan por, directamente devolver al galgo, y cuando esto ocurre, el pobre animal sufre el desarraigo de perder a su familia.
La única familia que ha conocido.
Y nosotros que debemos luchar por todos los galgos y podencos, que se encuentran en las calles, o en zulos, o con la soga al cuello, para que ninguno a los que hayamos tenido la posibilidad de llegar, quede en el camino, y por los que no podemos perder ni un minuto, deberemos invertir un tiempo precioso, en reeducarle, y encontrarle una nueva familia, lo que irá en perjuicio de otro galguito que verdaderamente si nos necesite.
El adoptante debe disfrutar de su galgo, de su compañero de vida, su amigo, y también debe luchar por el y no fallarle jamás, por eso además de buenas intenciones, adoptar, requiere un ejercicio previo de reflexión y responsabilidad, porque miles de galgos y podencos, se juegan la piel todos los días, pero no están jugando, y por supuesto nosotros tampoco.
Cuando miro a los ojos de mi galga, no veo a un galgo, ni siquiera a un perro. Veo a mi amiga Lara, a quien no fallaré jamás y a quién acompañaré y ayudaré cuando me necesite.
Soy persona de pocos amigos, pero los que tengo los quiero de verdad.
Así que, si quieres adoptar a un compañero de vida, antes te pediré que te pongas la mano en el corazón y te hagas esta pregunta...¿ Que tal amigo eres tu ?

Si adoptas, que sea para siempre.

4 comentarios:

zuri dijo...

Ke razón llevas Cristina. Cuando miro a mi galgo, no puedo imaginar mi vida sin el, es un ángel, esos 31 Kg de dulzura, de sensibilidad, de respeto. No puedo, auque quiera, imaginar su penosa vida, de lo poco que sabemos, esos largos y duros 5 meses de invierno vagando por las cercanías de un pueblo de Salamanca, huyendo de los cazadores que andaban detrás de el para matarlo ya su vez, un gran hombre que anduvo dándole de comer intentando ganarse su confianza, todos los días de esos 5 meses, día a día, poco a poco, lo consiguió. Yo le estaré eternamente agradecida a este anónimo, al igual que a tant@s, que hacéis esta GRAN labor, porque detrás de cada galg@ recuperad@ hay una historia triste, pero lo más triste es que la gente se ha acostumbrado a esto..."hay un galgo! estos son los que maltratan"....Ojalá algún día esto sea una rareza, se limpien las generaciones y se penalice MUY duramente y la gente se conciencie que son seres vivos que sienten y padecen, no meros instrumentos de usar y tirar. Respecto a las adopciones, la gente que se plantea devolver a su nuevo compañer@ al primer "problema" ,debería de preguntarse a si mismo, que actitud tendría si hubiera pasado por una experiencia similar de abandono, maltrato o tortura....seguramente necesitaría de la ayuda de un sicólogo, no? y de la paciencia de sus seres cercanos. Así que seamos pacientes y brindemos oportunidades a estos seres tan especiales, nos devolverán el favor con MUCHAS creces. Gracias por no decaer chic@s!! y gracias por presentarme a mi amigo y compañero Ronnie y con el, a toda la maravillosa gente ke he conocido por medio de esta cadena-familia-equipo de personas ke adoramos a estos seres tan especiales.

marc dijo...

gran reflexion.ellos tambien tienen sentimientos,es una pena que mucha gente se piense que el animal ya no digo galgos sino que generalizo,se piensen que son un objeto de decoracion o un mueble que se puede cambiar o tirar si no gusta o acaba molestando.adoptar un animal es muy serio tienes que pasar por todas las etapas de adaptacion,si ladra quando te vas si se hace caca y pipi..etc.felicidades haceis una gran labor.

Cristina Bahamonde dijo...

Felicidades una vez más Cristina.
Qué bien llegas, seguro que a más de uno le ha tocado, y en este momento se está pensando muy seriamente adoptar un galgo.
Meditadlo bien!. A veces piensoen cómo estaríamos nosotros humanos si hubieramos sufrido lo que ellos.Seguramente ni con muchos antidepresivos lográbamos salir.
No dejará nunca de sorprenderme
su capacidad de recuperación....y lo más increible...de perdón hacia quienes le hicieron mal.
Aprendes continuamente con ellos.
Qué bonita foto de Lara! No habla porque la forma de sus fauces no la deja, pero con la mirada lo dice todo!

marc dijo...

es muy bonita,me parece que la conocí ayer en sabadell.