Mina, la dulce Mina, fue rescatada de la calle, llevaba varios meses apareciendo por el mismo campo sembrado, donde algunos vecinos le daban de comer, al principio era muy desconfiada, pero poco a poco, esas personas pudieron acercarse a ella, y al final consiguieron que tuviera confianza en ellos y rescatarla.
Fue primero a una residencia unos días y luego a una casa en acogida, de la que nos dio un susto bueno porque escapó, aún estaba confusa y asustada, y le dio miedo quedarse sola en casa.
Cuando volvió a los tres días encontramos para ella una casa donde vivieran otros perros, para que su recuperación fuera más sencilla, y lo ha sido gracias a la paciencia y el buen hacer de Gemma, ahora vive con otros dos perros, dos adultos y un niño, que la adoran, se ha adaptado muy bien a ellos, y no queda ya nada de aquella desconfianza y timidez con la que llegó.
Pero como siempre hay un pero con estos sufridos y nobles perros, el vivir en la calle le ha pasado factura a Mina y tiene filaria, su tratamiento es costoso, y conlleva gran riesgo para su vida, ella está muy fuerte y animada, así que tenemos todas las esperanzas puestas en su recuperación, y de eso depende que luego Mina pueda ser adoptada, pero una vez más, es dinero que necesitamos, no podemos dejarla morir.
Su tratamiento ya ha comenzado y su cuerpo está respondiendo muy bien a él, pero es un esfuerzo muy grande para galgos112 cada uno de estos desembolsos, tenemos que hacer mil cuentas cada vez, y nunca nos alcanza.
Toda la ayuda que podamos conseguir es importante, porque hay galguitos esperando, demasiados...
Fue primero a una residencia unos días y luego a una casa en acogida, de la que nos dio un susto bueno porque escapó, aún estaba confusa y asustada, y le dio miedo quedarse sola en casa.
Cuando volvió a los tres días encontramos para ella una casa donde vivieran otros perros, para que su recuperación fuera más sencilla, y lo ha sido gracias a la paciencia y el buen hacer de Gemma, ahora vive con otros dos perros, dos adultos y un niño, que la adoran, se ha adaptado muy bien a ellos, y no queda ya nada de aquella desconfianza y timidez con la que llegó.
Pero como siempre hay un pero con estos sufridos y nobles perros, el vivir en la calle le ha pasado factura a Mina y tiene filaria, su tratamiento es costoso, y conlleva gran riesgo para su vida, ella está muy fuerte y animada, así que tenemos todas las esperanzas puestas en su recuperación, y de eso depende que luego Mina pueda ser adoptada, pero una vez más, es dinero que necesitamos, no podemos dejarla morir.
Su tratamiento ya ha comenzado y su cuerpo está respondiendo muy bien a él, pero es un esfuerzo muy grande para galgos112 cada uno de estos desembolsos, tenemos que hacer mil cuentas cada vez, y nunca nos alcanza.
Toda la ayuda que podamos conseguir es importante, porque hay galguitos esperando, demasiados...
No hay comentarios:
Publicar un comentario